¿Decoración profesional? ¿Para qué si podemos reformar o decorar la casa nosotros mismos? ¿Por qué contratar a un diseñador de interiores? Aquí tienes las razones.

ESTÉTICA
Un decorador es un profesional de su campo, y es la opción más recomendable cuando queremos un trabajo de decoración bien hecho, igual que recurrimos a un mecánico para arreglar nuestro vehículo.
El decorador escogerá una estética no condicionada por sus gustos personales (que sería lo que haríamos nosotros), sino orientada a crear un espacio atractivo, basándose en las tonalidades y los elementos más adecuados al entorno que está decorando, la luz presente en ese espacio, y asegurando la funcionalidad del conjunto.

AHORRO
Un decorador profesional está acostumbrado a trabajar con materiales y proveedores, y podrá aconsejarnos sobre qué elementos precisamos para nuestro proyecto con la mejor relación calidad-precio. Piensa en que si tú utilizas el método de prueba y error, al final, probablemente, te saldrá más caro.

CONTRATAR AL PROFESIONAL
Lo ideal es conseguir presupuestos para comparar de varios profesionales de competencia contrastada y que ofrezcan una garantía de su trabajo. Todos deben presupuestar los mismos conceptos para que la comparación resulte efectiva.
Por último, es buena idea firmar un contrato de obra para acotar el proyecto y evitar malentendidos. Así evitaremos la aparición de extras.

En tu próximo proyecto de decoración o reforma de tu casa confía en un profesional y verás cómo los resultados te sorprenden de manera positiva.